Tras dedicar más de 15 años a exponer el submundo de la explotación sexual y la trata en Asia y las Américas, la periodista internacional Chelo Alvarez-Stehle se ve en la necesidad de volver a la playa de Zarautz que dio fin a su infancia con el fin de desvelar secretos de familia. Durante su trabajo con supervivientes de tráfico sexual, Chelo conoce a Virginia Isaías, una mujer mexicana residente en California que había sido secuestrada y forzada a prostituirse por una red de trata y prostitución en Chiapas.

La cineasta se sirve de recuerdos de la infancia firmemente enraizados para sumergirnos en una exploración íntima y poética de la violencia sexual. Contemplamos un diálogo visual que yuxtapone sus experiencias personales con las de Virginia y su afán a vida o muerte de romper el ciclo de explotación sexual que la arrolla. La película arroja luz sobre las íntimamente ligadas cadenas de abuso y silencio que atrapan a las supervivientes en un patrón recurrente de violencia.

Cuando Virginia consigue liberarse de sus captores, el espectador se siente fascinado por su edificante evolución en una líder ejemplar contra la esclavitud de nuestros días.

Inspirada por el valor de Virginia, Chelo decide ahondar en su inquebrantable pasión por denunciar este tipo de historias. De ahí nace un viaje paralelo de introspección que quiebra el silencio sobre el abuso sexual en su familia y en su propia vida.